5 trucos para enseñar la tabla del 8 a los niños

Cuando un niño ya ha llegado a la tabla del 8, es porque ha avanzado exitosamente en el estudio de las tablas de multiplicar, sin embargo, hay que ayudarlo para que aprenda a asimilar la misma de la mejor manera posible. Por suerte, eso es ahora posible gracias a unos sencillos trucos que le serán de gran apoyo para su formación.

Los niños, cuando comienzan a aprender las tablas de multiplicar, desarrollan habilidades especiales en la mente, que les ayudan a avanzar progresivamente en su aprendizaje. Desde la tabla del 1 a la del 9, van asimilando nuevas técnicas, para profundizar mejor en las cada vez más complicadas operaciones.

Cuando llegan a la tabla del 8, es porque ya han aprendido las anteriores y han perfeccionado los métodos, para captarlas cada vez más rápido y mejor. Sin embargo, es bueno aplicar algunos sencillos consejos que pueden ayudar a los niños a memorizarlas y a entenderlas mejor.

A continuación se presentan 5 fáciles trucos que serán de mucha utilidad para aprender las tablas fácilmente.

Memorización

Esto no es que sea un truco, pero es la manera más común de aprender una tabla de multiplicar, y más la del 8, que es realmente complicada. Solo basta con repetir la tabla de forma ordenada y consciente de que el plan es memorizar, una y otra vez, hasta que quede plenamente grabada en la mente.

Es muy fácil, la clave está en ser constante y practicarla. Lo malo es que puede ser aburrido para algunos niños, y por eso, es importante buscar algunas estrategias entretenidas, para que se interesen por su aprendizaje.

Aprender cantando

Esta es una derivación de la técnica anterior, solo que incluye música y canciones con letras que involucran la propia tabla en sí, es decir, las letras de las canciones deben ser la misma tabla.

El plan es que los niños memoricen las operaciones cantando, para cuando les toque aplicarlas, que el cerebro les mande la información que han retenido con las canciones.

Relacionarla con la tabla del 4

Los resultados de la tabla del 8 representan el doble de los que se obtienen en la tabla del 4 para la misma parte de los números que corresponden, es decir, cada operación con el 4 es el doble que cuando se hace con el 8.

Por ejemplo, 4 x 8 = 32, entonces 8 x 8 = 64, que es el doble de 32, y así con todos los números. La ventaja de usar esta técnica, es que los niños que ya están familiarizados con la tabla del 4, pueden asociar sus resultados con los de la tabla del 8, y aprenderla más fácilmente.

Usando los dedos de las manos

Otro efectivo truco para resolver los resultados de la tabla del 8, desde el 6 hasta el 10, es colocando las manos frente a la cara, haciendo que se toquen las puntas de los dedos y enumerándolos del 10 al 6, comenzando por el pulgar, con lo que en cada mano, el dedo índice queda marcado como el 8.

Luego, deben colocar el dedo 8 al número de la otra mano que vayan a multiplicar (del 6 al 10). Los dedos que se tocan, más los que quedan debajo, indican las decenas, mientras que los que se mantienen arriba se multiplican para conformar las unidades. Cuando se suman los dos resultados, se logra el total.

Ejemplo: si el índice de una mano toca el pulgar de la otra, quedarían 8 dedos hacia abajo, que indican la decena de 80, y dos dedos arriba en una mano y ninguno en la otra, lo que al multiplicar indican 0, que sería la unidad de la operación. Entonces, quedaría 80 + 0 = 80.

Imprimiendo la tabla

Que el niño cargue la tabla impresa en una tarjeta y la revise cada vez que pueda también puede ayudar a su memorización. Eso sí, se le debe inculcar la revisión periódica de la tabla, para que realmente la aprenda.

Para lograr que el pequeño la vea y demuestre que la está aprendiendo, puede ser bueno motivar al mismo con palabras bonitas o con un sistema de recompensas, todo vale.

Fuente: https://tablas-multiplicar.com/tabla-del-8/