La infancia es una etapa crucial para establecer hábitos que perdurarán toda la vida. En este periodo los niños son como esponjas, absorben todo lo que ven y viven a su alrededor. Por ello, es fundamental que los padres sean ejemplos a seguir y les brinden las herramientas necesarias para que adopten un estilo de vida saludable. En este artículo te traemos algunos consejos.
4 consejos para establecer buenos hábitos alimenticios
- Predicar con el ejemplo: Ofrecer una alimentación balanceada y variada en la que abundan frutas, verduras, legumbres y cereales integrales. Limitar el consumo de azúcares refinados, grasas saturadas y alimentos procesados.
- Involucrarlos en la cocina: Hacer de la cocina una experiencia familiar, permitiendo a los niños participar en la preparación de sus comidas, eligiendo ingredientes y ayudando con tareas sencillas.
- Establecer horarios de comidas regulares: Evitar el picoteo y fomentar el hábito de comer en familia en horarios establecidos.
- Hidratación adecuada: Asegurar un consumo suficiente de agua durante el día. Motivarlos a beber agua natural en lugar de bebidas azucaradas.
Fomentar la actividad física
- Convertirla en un momento de diversión: Fomentar la actividad física a través de juegos, deportes al aire libre o actividades en familia como bailar o caminar.
- Limitar el tiempo frente a pantallas: Establecer límites para el uso de televisiones, videojuegos y dispositivos electrónicos.
- Animarlos a explorar y moverse: Brindarles espacios para que jueguen y se diviertan al aire libre, fomentando la exploración y el movimiento natural.
- Dar el ejemplo: Practicar actividad física regularmente y convertirlo en un hábito familiar.
Establecer buenos hábitos higiénicos y una rutina de sueño
- Establecer rutinas de sueño: Crear rutinas de sueño consistentes que incluyan un horario regular para acostarse y despertarse, incluso los fines de semana.
- Generar un ambiente adecuado para dormir: Asegurar un ambiente tranquilo, oscuro y fresco en la habitación del niño.
- Evitar las pantallas antes de acostarse: Evitar el uso de dispositivos electrónicos antes de dormir, ya que pueden interferir con el sueño.
- Fomentar hábitos relajantes antes de dormir: Leer un cuento, tomar un baño caliente o escuchar música tranquila pueden ayudar a los niños a relajarse y conciliar el sueño.
- Lavarse las manos con frecuencia: Enseñar a los niños la importancia de lavarse las manos con agua y jabón con frecuencia, especialmente antes de comer, después de ir al baño y después de estar en contacto con animales o superficies sucias.
- Cepillarse los dientes: Inculcarles el hábito de cepillarse los dientes dos veces al día, durante al menos dos minutos, y usar hilo dental una vez al día.
- Bañarse regularmente: Enseñarles la importancia de bañarse regularmente para mantener una buena higiene personal.
- Cubrirse la boca al toser o estornudar: Enseñarles a cubrirse la boca y la nariz con el codo o un pañuelo desechable al toser o estornudar para prevenir la propagación de gérmenes.
Aspectos a tener en cuenta
Además de estos consejos para padres que quieren fomentar buenos hábitos en sus peques desde una pronta edad, es importante ser comprensivos con sus errores y celebrar sus logros.
Se debe mantener una comunicación abierta y honesta con los niños sobre la importancia de una vida saludable. Responder a sus preguntas con paciencia y claridad. Es fundamental que los padres sean un buen ejemplo de los hábitos que se quieren fomentar en los niños.