Cuidar del medio ambiente, de la naturaleza y del mundo que nos rodea es esencial. Una labor muy importante que nos va a permitir llevar esta acción a cabo es el reciclaje. Según Ecoembes, cada español genera una media de 450kg de residuos al año, de ahí la necesidad de reducir el impacto negativo que los residuos generan en el Planeta Tierra y en sus ecosistemas. Si bien es cierto que en muchas ocasiones no sabemos qué tirar en cada contenedor (azul, amarillo, verde, marrón y gris).
En La Diversiva os queremos aclarar esas dudas tan frecuentes, para que tanto los peques como los padres aprendan a reciclar de una manera efectiva y sin esfuerzos con estas claves.
¿Qué es el reciclaje?
El reciclaje es el proceso por el que se convierten los residuos en nuevos productos o en materia prima para poder utilizarlos posteriormente. Un proceso menos costoso que fabricar un nuevo producto, además de todos los beneficios que proporciona al medio ambiente.
Reciclando ayudamos a reducir la contaminación ambiental, se disminuye la emisión de gases de efecto invernadero y se ahorra agua (tan escasa en Andalucía en estos últimos años debido a la sequía), energía y materia prima. Siendo uno de los elementos del famoso proceso de las 3R: reutiliza, reduce y recicla.
¿Qué debemos tirar en cada contenedor?
En la actualidad contamos con cinco tipos de contenedores: azul, amarillo, verde, marrón y gris. Muchas veces las familias y niños se ven frustrados al inicio de este proceso de reciclaje pues no saben qué residuos pueden o no tirar en cada contenedor, como por ejemplo un pañal, la ropa que ya no queremos, bastoncillos o productos sanitarios de mujer, etc. En este artículo te explicamos detalladamente qué se puede tirar en cada contenedor.
Contenedor azul: Papel y cartón
En Málaga se han recogido 1.183 toneladas de papel y cartón en el año 2022 según los datos de Ecoembes, una pequeña acción con la que se contribuye a disminuir los gases de efecto invernadero.
¿Qué materiales de papel/cartón podemos depositar en este contenedor? En él se pueden tirar periódicos o revistas, folletos, álbumes, cuadernos (sin espiral y sin grapas), hueveras de cartón, papel de cocina o cualquier papel mojado con agua, libros en mal estado, bandejas de cartón, papeles y cajas. Un consejo que nos trae Ecoembes es depositar en casa estos residuos en bolsas de papel que nos dan en supermercados o tiendas y tirarlo directamente al contenedor.
Ahora bien, los briks (leche, zumos…), papel de aluminio, pañales, servilletas y pañuelos de papel sucios (con mocos, residuos orgánicos, con grasas o aceites etc.); no se pueden depositar a este contenedor.
Contenedor amarillo: Embases y plásticos
Este contenedor es el más usado y conocido a la hora de reciclar en casa ya que la mayoría de alimentos que compramos en los supermercados se encuentran envasados en plásticos. Por lo tanto, en este contenedor se pueden tirar todos los envases (botellas de agua, botellas de refrescos, briks de leche, productos de limpieza, geles de baño, colonias , champú, bolsas de congelados, tarrinas de mantequilla y yogures); así como otros elementos hechos de metal como latas de conservas, bebidas, bandejas de aluminio, aerosoles, tapones y tapas de botellas y briks (vino, batidos, zumos, etc.).
Otros elementos que se pueden depositar son: bandejas de corcho blanco, envoltorios de plástico, bolsas de aperitivos/ golosinas y las bolsas de plástico, que incluso podemos aprovechar las que nos dan en los supermercados y tiendas para tirar en casa estos residuos.
¿Y qué no puedo tirar? Productos como ropa, cintas de video, cuerdas, medicamentos y envases de medicamentos, etc. Así como residuos como vidrio u orgánico, que van en otro contenedor.
Contenedor verde: Vidrio
Se recomienda que las botellas y envases de cristal que queramos desechar los vaciemos de su contenido antes de depositarlos en el contenedor. En él van las botellas de vidrio (licores, vino, etc.), frascos de vidrio (salsas de cocina, mermeladas, conservas, vegetales y similares) e incluso los frascos de cosmética como perfumes/colonias/cremas/serum…
Eso sí, las tapas de los envases de vidrio, ceniceros de cristal, tapones, corchos, cristales rotos de espejos o vasos, ventanas, bombillas, porcelana o cerámica y tubos fluorescentes, no se deben depositar.
Contenedor marrón: Residuos orgánicos
Este es otro de los contenedores que las familias mejor conocen: lo orgánico. En él desechamos todos los restos biodegradables que generamos en el hogar, de alimentos (frutas, restos de la comida, posos del café, infusiones, cáscaras, etc.) o aquellos papeles o cartones manchados de grasa o aceite, pequeños restos vegetales de flores y hojas, tapones de corcho y serrín (tan empleado en la temporada navideña), entre otros.
Sin embargo las familias emplean este contenedor como su cajón desastre y confunden algunos restos domésticos, como válidos. Desde el polvo de barrer, colillas/cenizas, hasta textiles (sanitarios, pañales, compresas, tampones, basconcillos, toallitas húmedas, hilo dental, tiritas, esparadrapos, algodón…).
Contenedor gris: El resto de residuos
Este contenedor genera mucha confusión con el marrón pues los dos se destinan a residuos, entonces ¿Qué puedo tirar en el contenedor gris? El contenedor gris está destinado a esos residuos procedentes de basura doméstica que no disponen de un contenedor específico en la vía pública, como es el caso de los pañales.
También irán los restos de sartenes estropeadas, vajilla/cubiertos/ juguetes/cristales rotos, objetos de plástico o metal que no sean envases, etc.
Si te ha quedado alguna duda sobre qué contenedor es el adecuado, desde La Diversiva te aconsejamos que le preguntes todas tus dudas a Limasín, el asistente virtual de la empresa Limpieza de Málaga Sociedad Anónima Municipal.
Además, desde La Diversiva te contamos cómo enseñar a tus peques a reciclar y reutilizar los residuos de casa.
