Saturna se lleva los peques a la playa: pinta, colorea, sopla y crea

Una actividad muy creativa y participativa que niñas y niños pueden desarrollar en la playa con muy pocos elementos y que da para un buen rato de diversión. Y además muy económica.
Necesitamos:
-Lienzo de tamaño mediano
-Pincel
-Pintura dactilar o acuarelas al agua, colores básicos
-Tizas de colores, tamaño grande
-Rotulador
-Pegamento escolar y/o silicona fría
-Colorante alimentario azul
-Pajitas de cartón
-Recipientes de plástico
-Rallador
-Arena fina de playa, conchitas, caracolitas, piedras de colores… y
cualquier elemento marino
Una vez en la playa, recogeremos el material que nos proporciona la naturaleza, en este caso arena, conchas, caracoles, piedras, algas, palitos… una tarea de exploración muy amena por el hecho de descubrir y decidir.

¡Nos vamos a la sombra! Y nos disponemos a rallar tiza de colores sobre un recipiente con la arena recogida, se pueden mezclar colores al gusto, se remueve con las manos y enseguida veremos como se tiñe.

Seguidamente, con tiza azul, pintaremos el cielo.

En la parte de abajo del lienzo, extenderemos la cola con el pincel para rápidamente espolvorear la arena que hemos coloreado y así vaya secando.

Ahora llega el momento de crear y de imaginar…pues con las acuarelas de colores y utilizando los dedos, iremos pintando nuestro paisaje. Saturna aconseja estar cerca de la ducha o bien tener toallitas limpiadoras a mano.

Ya podemos soplar la arena restante del lienzo! ¡Es muy divertido! Pero cuidado con los ojos, depende como sopla la brisa, puede ser un desastre… jejeje.

Este es el momento que más les gusta, pegar los elementos a modo de decoración de su cuadro, para eso recomiendo la silicona fría, pues pega más rápido y fuerte.

Saturna, tuvo una idea genial y con ganas de experimentar, ¡tan solo necesitaba estar al aire libre! Y su sorpresa fue que también les emocionó mucho a los peques y no tan peques. Se trata de llenar un recipiente o vaso de plástico con agua, echaremos unas gotitas de colorante azul hasta teñir el agua como si del mar se tratara…

Cogemos una pajita, previamente hubo que probar unos cuantos modelos, y finalmente ganaron las de cartón, estupendas para esta actividad. Se trata de aspirar el agua y sin tragarla (aunque no se corre peligro pues es agua con colorante) e inmediatamente soplar hacía fuera, es decir, echar el agua encima de la parte superior del lienzo, justo dónde pintamos el cielo. Enseguida veréis como las marcas de agua con la tiza, crean un efecto de cielo precioso.
Es un momento bastante excitante para los niños y las niñas, ya lo comprobaréis.
Y ya, simplemente, hay que dejar secar. Y por supuesto, firmar la obra con un rotulador.
Pues ya tienes un lienzo pintado y creado por el niño con materiales de la naturaleza, divirtiéndose e utilizando varias técnicas táctiles, visuales, motoras y sensoriales.
Deseo que os haya gustado esta actividad creativa de verano, original y económica nuevamente.
Un saludo cósmico.

Si deseas ver más ideas creativas, consulta el resto de artículos sobre manualidades en el blog de La Diversiva para poder divertidas actividades con tus peques.