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Tipos de ansiedad, sus síntomas y tratamiento

Tipos de ansiedad, sus síntomas y tratamiento

Preocupación, nerviosismo, presión en el pecho, palpitaciones… Son algunos de los síntomas de la ansiedad, palabra que se ha convertido muy frecuente desde la pandemia del COVID-19. La ansiedad, el insomnio y los temores en general han aumentado tanto en niños y adolescentes como en adultos, tal y como afirman varios estudios en diversos países.

En un artículo anterior te explicamos qué es la ansiedad y cómo diferenciarla del miedo y el estrés. Ahora, ¿la ansiedad es siempre perjudicial o podría ser beneficiosa? Para responder a esta pregunta, en este artículo veremos los tipos de ansiedad, además de sus síntomas y tratamiento.

Tipos de ansiedad

Existen diversas clasificaciones sobre los tipos de ansiedad. No obstante, debido a su importancia, nos centraremos en el criterio de funcionalidad, es decir, hasta qué punto puede ser útil o dañina. Según esto, tendremos dos tipos de ansiedad:

Ansiedad funcional: Cuando la ansiedad tiene la intensidad y duración adecuada para enfrentarnos a situaciones que requieran “activación”. Un ejemplo de ello es la “Ley de Yerkes-Dodson” (1908), que relaciona el componente de activación de la ansiedad (arousal) con el rendimiento (performance).

Pincha en la imagen para ampliar.

En la imagen anterior podemos ver que el arousal y el rendimiento mantienen una relación en forma de “U” invertida: el arousal bajo y alto empeoran el rendimiento. En cambio, el arousal moderado mejora el rendimiento.

Es por ello que muchas personas que se encuentran en un estado “poco activo” consuman una taza de realizar una tarea demandante de energía, como estudiar o trabajar.

Ansiedad perjudicial: Cuando la ansiedad tiene una intensidad y duración inadecuadas, es decir, es muy intensa y persiste en el tiempo y/o regresa frecuentemente. Esto hace que se produzca bastante malestar en las personas que la experimentan, pudiendo interferir en los distintos ámbitos de sus vidas (trabajo, estudios, relaciones, ocio, etc.).

A continuación, presentamos los síntomas más habituales de la ansiedad perjudicial para los distintos rangos de edad.

Síntomas de ansiedad

En adultos/as, se produce con más frecuencia:

Preocupación continua por los síntomas y/o acontecimientos futuros.
Pensamientos negativos.
Dificultad para concentrarse y mantener la atención.
Evitación de situaciones.
Necesidad de ejercer control sobre sí mismo, los demás y/o las situaciones.
Insomnio.

En niños/as y adolescentes, suele manifestarse como:

Preocupación por acontecimientos futuros, generalmente en el ámbito escolar y social (ej. anticipar que va a suspender o que le van a criticar).
Problemas de concentración y disminución del rendimiento académico.
Realización de “rituales” (comportamientos rígidos para reducir la ansiedad).
Pesadillas.
Tartamudez.

En niños/as más pequeños, suele aparecer:

Problemas para controlar los esfínteres.
Preocupación continua por la posible pérdida de seres queridos (ej. madre, padre) o que sufran daño.

Aunque podamos identificarnos con alguno de estos síntomas, únicamente se considera ansiedad perjudicial si:

Sentimos un gran malestar.
Tenemos dificultad para realizar tareas en los distintos ámbitos de la vida.
La ansiedad dura en exceso o aparece frecuentemente.

En dicho caso, un/a especialista en Psicología realizará una evaluación completa para su tratamiento individualizado.

Tratamiento para la ansiedad

El tratamiento varía según la persona y su sintomatología. No obstante, se utilizará el siguiente procedimiento:

1º Evaluación: Analizaremos tanto la situación que produce ansiedad (cómo se originó y qué la mantiene actualmente), como algunos aspectos de la persona que la predisponen a experimentar ansiedad.

2º Intervención: Trabajaremos desde un enfoque global y multidisciplinar, tanto a nivel psicológico como pedagógico. El objetivo es guiar a la persona hacia el descubrimiento de sus propias fortalezas para gestionar la ansiedad y reducir su malestar.

Se trata de un trabajo colaborativo, en el que la persona y el/la profesional reducirán los factores que mantienen la ansiedad, tanto del contexto (ej. situaciones que la generan) como de la propia persona (ej. pensamientos anticipatorios negativos).

Si quieres más información, puedes contactar con el equipo de especialistas de Centro Te Motivan que darán respuesta a la ansiedad de manera integral. Centro Te Motivan siempre cerca de ti!

María Vertedor Álvarez,
Psicóloga Colegiada nº AO 12455.

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