Cada vez son más las personas que deciden sumarse a la cultura sostenible y dar una nueva vida a cosas de la casa que parecen no tener arreglo como muebles, ropa y, por supuesto, juguetes. Esto último es especialmente interesante cuando se acercan fechas como los Reyes Magos, ya que la reparación de los mismos se puede convertir en un juego en familia donde inculcar a los más pequeños el valor del reciclaje.
Una avalancha de juguetes
Todos hemos visto con ilusión la proximidad de la Navidad y la cabalgata de Reyes en las que los regalos son los absolutos protagonistas.
Sin embargo, en los últimos años e incluso décadas se ha perdido la conciencia de algo que antes era lo más normal del mundo. Se trata del reciclaje de juguetes. Hace no mucho, estos se hacían con materiales como la madera o el metal, por lo que estaban pensados para durar mucho tiempo sin presentar demasiados signos de desgaste.
Era otra cultura, ya que hoy prima la novedad y el cambiar de juegos de un año a otro. Sin embargo, son muchos los padres e incluso los jóvenes que saben que esto es un problema para el medio ambiente, por lo que quieren ponerle remedio desde su propia iniciativa.
Qué se necesita para reparar juguetes
Incluso los juguetes más modernos, esos que parecen que están hechos para ser consumidos rápidamente y olvidados, pueden tener muchas vidas. El único truco para conseguirlo es saber cómo repararlos.
Por un lado, es cierto que aún quedan expertos en la materia. Se conocen como doctores de juguetes y su trabajo es casi centenario. Eso sí, cada vez es más difícil encontrarlos, por lo que lo mejor es hacer este trabajo uno mismo.
Para reparar los juguetes no hacen falta demasiados materiales, basta con algunas de estas cosas:
– Material de corte como tijeras.
– Un pegamento que sea apto para todo tipo de materiales.
– Repuestos adaptables a los juguetes.
Con materiales sencillos y con un poco de paciencia, incluso los juguetes que parecen definitivamente rotos pueden cobrar nueva vida. Es más, esta actividad puede convertirse en un juego si se hace junto a los pequeños.
Las ventajas de jugar a curar juguetes
Para los niños, no hay nada mejor que aprender jugando. Pues bien, conceptos como el de reutilizar y reparar las cosas en lugar de tirarlas y comprar nuevas, es algo que se puede conseguir fácilmente con esta tarea.
Es más, si los niños tienen mucho aprecio por los juguetes, pronto descubrirán que sus cosas favoritas pueden ser reparadas y que tienen una vida útil mucho más larga de la que piensan. Este mensaje es fundamental para inculcar una pronta conciencia ecológica en los más pequeños. De esta forma, se puede plantear el momento de reparar los juguetes con los niños como un juego en sí. Es más, se puede dar ambiente creando un pequeño hospital para juguetes de manera que los pequeños se metan aún más en el papel, ya que la imaginación es fundamental a la hora de jugar.
En definitiva, reparar juguetes es algo que tiene más ventajas de las que cabe imaginar, por lo que es una tarea ideal para poner en práctica con toda la familia.
Me encanta!
Nos alegramos mucho.