Flor de Pascua en Navidad: más que una tradición, un símbolo de celebración en familia

La Navidad es una fecha muy especial en todo el mundo tanto para pequeños como para mayores. A ella va unida una serie de tradiciones que van pasando de generación en generación: los villancicos, las doce uvas de la suerte, los dulces típicos como el turrón, el roscón de reyes o los polvorones, la lotería o el abeto. Uno de los elementos característicos de la época navideña en España es la Flor de Pascua o Poinsettia, una planta que inevitablemente relacionamos con la Navidad y a la que se le otorga el don de darnos buena suerte durante todo el año.

La Flor de Pascua, cuyo nombre científico es Euphorbia pulcherrima, es una planta cuyas hojas se tornan de un color rojizo y de la que cada año en nuestro país se venden ocho millones de unidades.

La Poinsettia junto a un Ramo de Navidad son los arreglos florales más habituales para conseguir que los hogares transmitan ese espíritu navideño.

La planta que llegó de México

Originaria de México y América central, la Flor de Pascua o Poinsettia tenía un significado de fuerza y pureza y sus hojas de color rojo intenso les recordaban a los indígenas la sangre de los sacrificios que ofrecían a los dioses.

Esta planta empezó a ser cultivada por los aztecas, quienes apreciaban la planta por sus cualidades medicinales. Cuando las hojas o ramas de la Euphorbia pulcherrima se rompen se obtiene una savia que se creía que tenía propiedades sanadoras, por lo que los aztecas la utilizaban para aumentar la producción de leche materna, como depilatorio o como antídoto para las picaduras de serpiente. A la Flor de Pascua también le encontraron otras utilidades, teñían con ella sus ropajes y fabricaban sus propios cosméticos.

El uso de esta planta cambió cuando los misioneros franciscanos llegaron a México en el siglo XVI y comenzaron a utilizarla como adorno floral en Navidad, cuando la colocaban en los pesebres. Sus colores rojo y verde, y que su florecimiento fuera en diciembre la convirtieron en la planta perfecta para sustituir al acebo que se usaba en Europa. Según la historia de la flor de Pascua que conocemos, fue un fraile franciscano de Taxco de Alarcón quien empezó a decorar su iglesia con estas plantas para darle más colorido.

Siglos después, en 1825, Joel R. Poinsett, el embajador de Estados Unidos en México, envió una colección de semillas y plantas naturales del país centroamericano a su tierra natal entre las que se encontraban la Euphorbia pulcherrima. Al poco tiempo empezó a ser muy popular en este país y en 1991 se declaró el 12 de diciembre como el día de la Poinsettia como homenaje a Joel Roberts Poinsett que falleció el 12 de diciembre de 1951.

Un símbolo Internacional

A principios del siglo XX, Albert Ecke, un inmigrante alemán en Estados Unidos, observó flores de Pascua silvestres en las colinas de Los Ángeles y tuvo la idea de venderlas en puestos de carreteras con el nombre de “planta de Navidad”. Además, en 1965, la empresa convenció a los productores de Hollywood para que la utilizarán como decoración de los programas navideños de la televisión, que en esa época ya era en color. Gracias al éxito que obtuvo, este se convirtió en un negocio familiar que creció durante décadas, hasta tal punto de expandirse a otros continentes.

Aunque la Poinsettia crece de forma silvestre en México, hoy en día se cultiva principalmente en países como Estados Unidos, Alemania y Australia. En España, se introdujo a principios de la década de los 80 y hay cultivos de Flor de Pascua en regiones como Cataluña, Cantabria, Andalucía y Murcia, pero es en Almería donde se concentra más del 30 por ciento de la producción nacional.

Actualmente en cualquier mercado navideño no faltan este tipo de plantas que además de en color rojo se pueden encontrar en rosa, blanco o amarillo.

Flor de Pascua, cómo cuidarla

Tener plantas en una casa con niños puede proporcionar varias ventajas, tanto para el bienestar de los niños como para el ambiente general del hogar. Mejoran la calidad del aire, son un estímulo sensorial, cognitivo y natural para los peques, reducen el estrés y ayudan a inculcar un sentido se responsabilidad y cuidado.

Sin duda, la Flor de Pascua es el adorno que no puede faltar para celebrar la Navidad en tu casa, ya que queda bien en cualquier habitación y con unos pocos cuidados te durará hasta el año que viene.

Lo principal es que reciba mucha luz natural, por lo que es conveniente que la coloques cerca de alguna ventana, pero mantenla alejada de temperaturas muy altas y de corrientes de aire.

Otro de los aspectos a tener en cuenta es el nivel de humedad, por eso es mejor que coloques la planta encima de un plato y pulverices sus hojas con agua de forma habitual. En cuanto al riego, comprueba que la tierra de la maceta está seca antes de volver a regarla y procura que tenga un buen drenaje para que elimine el exceso de agua. Si quieres que crezca más fuerte puedes añadir un abono líquido al agua de riego cada quince días.

Seguro que con estos cuidados tu Poinsettia lucirá espectacular e incluso podrás utilizarla en las próximas navidades.

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